La carne de cerdo en la gastronomía china es fundamental y protagonista de muchas de sus recetas. Existen varias propuestas culinarias típicas de este país que no dejan indiferentes a nadie. Eligiendo carne de cerdo de capa blanca y unos ingredientes y acompañantes adecuados, se pueden preparar comidas saludables a gusto de todos.
La carne de cerdo de capa blanca en la cocina china
El cerdo agridulce con pimiento y bambú es un plato digno de varias estrellas Michelín. Para este plato se emplea el lomo del cerdo, un pimiento rojo, un pimiento verde, pimienta negra, harina de maíz, un poco de levadura química, brotes de bambú escurridos, leche y cebolla. La salsa agridulce se prepara con vinagre de arroz, pimienta negra molida, tomate, salsa de soja, azúcar, sal y harina de maíz. Esta propuesta culinaria china es famosa en el mundo entero, y el contraste del bambú con el cerdo unido a la salsa agridulce le da al plato un sabor característico.
El de costillas de cerdo con cinco especias chinas es un plato de nueva tendencia que se está en auge en el gigante asiático. Su elaboración es sencilla: las especias mezcladas son estrella de anís, semillas de hinojo y granos se Sechuán (se pueden cambiar por curry), conjuntamente con miel, ajo y soja. La carne queda totalmente jugosa y se desprende del hueso con mucha facilidad.
Actualmente, es muy sencillo encontrar los fideos chinos en cualquier supermercado. Pues bien, con este ingrediente podemos hacer un wok de cerdo con fideos chinos. Para elaborarlo se requiere carne de cerdo (preferiblemente lomo), fideos chinos, salsa de soja, un limón, un poquito de jengibre molido, ajo, pimienta cayena o habanero y aceite de oliva virgen extra.
Las verduras al wok también son muy empleadas en la gastronomía china. Un plato muy habitual en los barrios de Pekín es el salteado de verduras con cerdo. Se necesita carne de cerdo (lomo o solomillo), berenjena, cebolla, ajo, setas, un chorro de vino de Jerez, salsa china picante (en caso de no encontrarla puede añadirse tabasco), harina de maíz, jengibre y salsa de soja. Este plato es muy ligero promoviendo una correcta digestión y evitando la pesadez de estómago.
Los tallarines son otro recurso muy común en la gastronomía china; es la pasta que más se utiliza en este país. El plato de tallarines con gambas y carne es uno de los más comunes y su elaboración es muy sencilla, pero su sabor, inmejorable. Para elaborar este plato se requieren tallarines, gambas peladas, zanahoria, berenjena, calabacín, puerro, cebolla, sal, salsa de soja, jengibre, carne de cerdo (preferiblemente cinta de lomo) y aceite de oliva virgen extra.
Los ingredientes empleados en la elaboración de estos platos son fáciles de encontrar en el mercado. Con un poco de imaginación y creatividad, la carne de cerdo de capa blanca puede estar presente en la cocina china de múltiples formas sabrosas.