El sector porcino de capa blanca español ha experimentado en las últimas décadas una profunda transformación que le ha llevado a convertirse, por méritos propios, en uno de los grandes líderes internacionales y en un referente de lo que se conoce como la ‘ganadería moderna’: profesionalizada, innovadora, respetuosa con la sensibilidad y necesidades de los animales y enfocada en la reducción del impacto ambiental y el cuidado del medio ambiente.
Para lograrlo, en su día a día, el sector porcino español aplica el modelo europeo de producción europeo y cumple con la legislación más exigente del mundo en bienestar animal, seguridad animal y protección del medio ambiente. De hecho, España fue el primer país de la UE en implementarla en el año 2013, no sólo cumpliendo con sus requisitos normativos sino yendo más allá de las exigencias europeas.