El modelo de producción del sector porcino de capa blanca español es, a día de hoy, el más garantista del mundo con la salud y el bienestar del ganado. Los ganaderos españoles trabajan con ahínco en el cuidado de los animales y velan por que se encuentren en las mejores condiciones. En este sentido, la importancia de la bioseguridad en las granjas de porcino españolases clave, ya que es la herramienta más eficaz para mejorar y mantener el estatus sanitario del sector.

 

España con una legislación específica en relación a la ordenación del sector porcino, donde se detallan los requisitos legales de bioseguridad que deben cumplir las explotacionespara poder desarrollar su actividad ganadera. Dichas medidas contemplan acciones como la creación de naves de cuarentena, vallados perimetrales, protecciones antipájaros en ventanas, sistemas de desinfección de vehículos de transporte, sistema de carga de purines y otros subproductos, uso adecuado de biocidas o programas de limpieza y desinfección, entre otras.

 

Todas ellas han llevado a que el nivel de bioseguridad de las granjas españolas sea el más alto no solo de la Unión Europea sino de todo el mundo y que el estatus de la cabaña ganadera sea sobresaliente. Para contribuir a todo ello no sólo caben destacar las importantes inversiones realizadas en los últimos años por el sector porcino sino también su alto grado de concienciación y formación en esta materia y la implicación de todos los agentes de la cadena de producción: propietarios, personal, veterinarios, administración pública y todo aquel que intervenga en la gestión de una granja.

 

Estas condiciones de bioseguridad permiten mantener a los animales libres de determinadas enfermedades, pero eso no quita que existan amenazas, como la Peste Porcina Africana (PPA), que exige al sector un trabajo tan duro o más como el que ha llevado a cabo hasta ahora en esta materia.

 

Como amenaza que es para la cabaña porcina, el deber del sector es intensificar las medidas y extremar las medidas de bioseguridad a lo largo de todo el proceso productivo: en las granjas, en el transporte y en los mataderos. Por ello la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca, está desarrollando una campaña de concienciación a raíz de la detección de PPA en algunos países del norte y este de Europa.