El sector porcino de capa blanca español lleva años trabajando con la sostenibilidad y el bienestar animal como pilares fundamentales en el ejercicio de todas las ramas de su actividad. Como muestra de ese compromiso por parte de todos los profesionales del sector porcino nace ‘Compromiso Bienestar Certificado’, el sello de certificación elaborado por la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca (INTERPORC), con el que da un paso más en ese firme compromiso por seguir mejorando nuestro modelo de producción, ya de por sí el más exigente del mundo  en cuanto al cuidado de los animales y el respeto por el medio ambiente.

Compromiso Bienestar Certificado surge por propia iniciativa del sector, y parte del profundo conocimiento de los profesionales de la producción y la industria del porcino. Además, está avalado y evaluado por un Comité Científico independiente formado por expertos en bienestar animal, y ha sido testado y validado por organizaciones de protección y defensa de los animales, posicionándose como uno de los referenciales europeos más ambiciosos.

En este sentido, nuestros ganaderos no sólo han mejorado las instalaciones de las granjas en beneficio de los animales, sino todo el modelo de producción desde la granja a la mesa. Granjas, alimentación de los animales, sanidad o transporte son algunas de las materias contempladas en esta rigurosa normativa.

Asimismo y en consonancia con las exigencias del sector porcino, INTERPORC creó en el año 2018 un Consejo Asesor de Sostenibilidad, formado por profesionales expertos en la materia cuyos miembros se encargan de evaluar los avances en materia medioambiental y proponer nuevas medidas para seguir mejorando. De este Consejo dependen dos subgrupos de trabajo: producción e industria.

Por otra parte, la Interprofesional forma parte de la Red Española del Pacto Mundial de las Naciones Unidas para la consecución de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y participa, entre otras iniciativas, con proyectos para reducir la huella de carbono, los Gases de Efecto Invernadero y la huella hídrica; así como mejorar la gestión de purines e impulsar las energías renovables.

Toda esta labor demuestra que el sector porcino español, que ya tiene motivos para sentirse orgulloso de un modelo sostenible que es referente a nivel mundial, no se conforma, sino que sigue avanzando para mejorar.