La carne blanca se sitúa como uno de los alimentos más importantes para cubrir las necesidades y requerimientos nutricionales del hombre, de ahí, la importancia del sector productor de carne. Hoy en día, el sector porcino de capa blanca en España constituye un sector de referencia a nivel mundial puesto que es el segundo productor de la Unión Europea (UE) y el cuarto del mundo.

Los cuatro ejes del sector porcino

En concreto, el sector porcino ocupa el primer puesto por lo que respecta a su importancia económica dentro de la Producción Final Ganadera del país. Es el sector de mayor importancia en la ganadería española y el que más contribuye a la renta de nuestros ganaderos. En efecto, en el ámbito económico, el sector porcino español únicamente está por detrás de los principales sectores como la petroquímica o la industria automovilística.

De igual modo, el sector porcino en España se basa en cuatro ejes principales: económico, puesto que uno de los promotores fundamentales en nuestro país, social, ya que es un impulsor esencial en el marco rural, alimentario, ya que ofrece alimentos y productos con la mayor calidad y sabor posible, y medioambiental, creando explotaciones más sostenibles.

El sector porcino español ofrece productos con un alto índice de calidad puesto que, aparte de cumplir con todos los requerimientos a nivel europeo, cuenta con una legislación más estricta a nivel nacional, autonómico y local, que engloba tanto las explotaciones porcinas como normativas en el ámbito medioambiental.

La internacionalización del sector porcino de capa blanca

En los últimos años, las exportaciones y ventas al exterior han ido acrecentándose, posicionando a España como el segundo país exportador más potente de la Unión Europea. En relación a la gran capacidad exportadora del sector porcino español, este ha incrementado sus ventas al exterior más de un 200 % en los últimos diez años. Esto ha sido gracias a la apuesta de este sector por la internacionalización y por el elogiable empeño que las empresas han puesto para exportar sus productos de calidad a más de 140 países a nivel mundial.

Como consecuencia, el valor añadido de todas las exportaciones de carne de cerdo y derivados cárnicos retorna a nuestro país y al territorio con el fin de fijar población y generar puestos de trabajo e infraestructuras que otorgan la oportunidad de realizar una gran variedad de actividades indirectas relacionadas con el sector ganadero.

El sector porcino de capa blanca en España vela por mantener la alta calidad de los productos que ofrece. Por ende, el desarrollo y crecimiento en este entorno en los últimos años ha ido orientado a mejorar y enriquecer el perfil y valor nutritivo de la carne de cerdo de capa blanca y los derivados cárnicos, los cuales ayudan a satisfacer las necesidades del ser humano.

De igual manera, la carne de cerdo de capa blanca hoy en día se produce de modo que contenga un 10 % menos de colesterol, un 13 % menos de grasa total y un 14 % menos de calorías. De este modo, su inclusión en la dieta forma parte de un estilo de vida saludable y equilibrado.